¿Qué pasó en Puerto Hurraco como dice C.Tangana?

La frase de «Aquello fue peor que Puerto Hurraco» es una frase que utiliza el cantante madrileño, C Tangana en la canción «Hong Kong» con Andrés Calamaro, pero ¿dónde está su origen?, ¿Qué pasó en Puerto Hurraco? En febrero del año pasado salía este tema del artista, pero para recordar este hito hay que remontarse hasta el verano la década de los noventa. En No Te Enrolles te lo contamos con todo lujo de detalle.

Conflicto entre familias

El conflicto entre los Cabanillas y los Izquierdo provocó una auténtica carnicería en una pedanía de un pueblo de Badajoz. Una disputa por delimitar el perímetro de una parcela, provocó el despertar del enfado en la segunda familia implicada. Amadeo Cabanillas, correspondía a la persona responsable de lo sucedido, aunque no fue la única batalla por la que se enfrentaron varias familias. Parece ser que un amor no correspondido también fue la chispa que encendió la llama. El único protagonista hasta ahora, parecía haber rechazado a una de las hijas de la otra familia, Luciana, que se quedó muy afectada por lo sucedido.

Aquello se saldó con una muerte atroz. A Amadeo lo habían encontrado muerto asesinado por el hermano mayor de la joven a la que había rechazado. El crímen era claro: había todo tipo de pruebas y este ingresó en prisión con una condena de catorce años. Pero la actividad del pueblo había seguido. En Puerto Hurraco se había provocado un incendio, para vengarse de lo de Jerónimo, quién había matado a Amadeo.

En aquella ocasión habían sido los Cabanillas los que habían provocado el fuego, pero por falta de pruebas no se concluyó nada. Al no resolverse, fue el mismo preso que había salido el que volvió a tratar de delinquir, pretendiendo cargarse a otro de los hermanos rivales. Aunque su pericia no fue del todo buena y acabó encerrado en un psiquiátrico, dónde acabó muriendo nueve días después.

En esta matanza se asesinaron a nueve personas

Tiempo después ocurrió la desgracia de un tiroteo del que no se olvida y que la cultura popular ha cogido sus propias referencias. Con la coartada de ir a por tórtolas, dos de los hermanos de la familia Izquierdo, se plantaron de nuevo frente a la casa de los Cabanillas y empezaron a emprender una ráfaga de tiros, para acabar con todos ellos y cualquiera que se pusiera por delante.

 

En total se dispararon a 21 personas, de las que habían sido heridas 20 y abatidas nueve. Dos de ellas, murieron semanas más tarde en el hospital. Entre las muertes se encontraban la de dos adolescentes de 13 y 14 años. Ese crimen significaba una venganza por lo del incendio. Los dos hermanos dispararon en su huida incluso a varios agentes de la Guardia Civil, quiénes también resultaron gravemente heridos, sin apenas poder salir del vehículo.

La huida de los hermanos Izquierdo

Tras la matanza, estos huyeron corriendo por piernas hacia el monte. Trataron de camuflarse entre los olivos, aunque no resultó ser todo lo efectivo posible. Los refuerzos de la Guardia Civil consiguieron encontrarles en las inmediaciones de aquellas laderas, durmiendo bajo la sombra de un árbol.

Su detención resultó ser de lo más sencilla posible ya que no opusieron toda la resistencia que habían descargado en el tiroteo previo. Sus comportamientos ante el juez, no eran de los tipos más arrepentidos del mundo. Uno de ellos llegó a desvelar que el sufrimiento del pueblo, era el que ellos mismos habían sentido durante los años en los que habían perdido a sus seres queridos. El otro hasta confesó que hubiera seguido disparando a los que habían restado vivos.

El juicio de la tragedia

Durante dicho proceso judicial, la sangre parecía seguir corriendo y es que había mucha sed de venganza en el ambiente. El padre de las niñas asesinadas, trató de cargarse con un cuchillo de largas dimensiones, a algunos miembros de la otra familia. Pero este no pudo realizar ese acto, ya que consiguió ser detenido a tiempo por la autoridad. Las represalias podrían haber sido mucho mayores.

La condena que les cayó rondaba cerca de los 684 años de cárcel y 300 millones de pesetas como indemnización. Las dos hermanas de los Izquierdo, no siguieron el camino de sus hermanos, pero estas ingresaron por prescripción médica en un Psiquiátrico por varios trastornos debido a todo lo ocurrido.

El fallecimiento de los autores

Las hermanas murieron en el Hospital en el que habían sido ingresadas, como uno de los hermanos quién también lo hizo de forma natural tras tener problemas de corazón. El más longevo aguantó hasta sus 72 años, cuando lo encontraron ahorcado en su celda con unas sábanas. Todavía le restaban cinco años de condena. Los Izquierdo de esta forma, nunca acabaron por vengarse de la familia Cabanillas.